martes, 13 de mayo de 2008

Regadio de Txirimiri para bonsáis



Regadío de txirimiri para bonsáis

Seamos previsores, en apenas unas semanas nos llega el verano y con este tiempo el calor y los puentes sin agua para nuestros bonsáis y el que dice los puentes dice los fines de semana largos sin agua y las vacaciones sin agua y las muertes de los bonsáis mas débiles de nuestras camadas.
Así pues propongo la instalación de un sistema de riego que nos pueda sustituir en los días que tanto calor hace y tan en falta nos echan nuestros pequeños. Yo os propongo un sistema que he utilizado desde hace algún año y que no me ha funcionado mal.
Lo primero que debo decir es que no aconsejo dejar los bonsáis en la bañera con agua, porque es muy posible que nos los encontremos con los entrenudos muy largos debido a la escasez de luz o lo que es peor con un problema de hongos y o podredumbre en las raíces.
Luego tenemos el gota agota pero... Es muy difícil de ajustar y cuando conseguís poner a punto y os vais, a la vuelta siempre hay alguna sorpresa, que este se ha atascado, que si por aquí sale mucho... Es por todos estos y otro motivos que desaconsejo fiarse de ellos, a mi ya se me han quedado alguno en el camino por fiarme de estos inventos. Yo propongo la pulverización nocturna. Y ¿como lo hacemos? pues muy sencillo:
Necesitamos una zona donde no importe que se moje, como por ejemplo, un balcón o una terraza. Y también:
· Una bomba peristáltica (la bomba de una lavadora vieja)
· Un tubo de nailon, los que se utilizan para el aire comprimido, de 4x6 ò 6x8.
· Un pulverizador, que se puede adquirir en establecimientos de aire comprimido.
· Un deposito de +/-25 litros, claro cuantos mas litros mas autonomía tendrá el invento.
· Un reloj temporizador eléctrico.
· Y una toalla, manta, alfombra etc., que pueda coger el agua sobrante.

¿Como lo montamos?
Pues en primer lugar elegimos el sitio donde colocaremos los bonsáis, esta zona no debería ser mas grande que +/-4 m2, si tuviéramos tantos árboles que en esta superficie no entrara, habría que poner dos inventos.
Cuando tengamos el sitio elegido colocaremos la alfombra, manta o el elemento elegido para recoger el agua sobrante. En el centro de la superficie colocamos los bonsáis que mas necesidades hídricas tienen y en las afueras los que menos necesidades y programamos el reloj para que por la noche pulverice el agua en forma de Txirimiri.
Conviene probar unas noches antes hasta su ajuste, podéis partir como yo lo tengo, que es diez minutos cada media hora pero dependiendo del grosor de la gota este tiempo variará.
Para que el agua caiga uniforme, debemos colocar el dispersor a una altura de unos dos metros de altura.
Hay que tener en consideración los vientos predominantes debido a que el aire puede arrastrar la fina lluvia artificial hacia otro sitio.

Situación del monte Pagasarri